Beneficios:
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El ácido glicólico exfolia suavemente la piel, estimulando la renovación celular y mejorando la textura y luminosidad.
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El ácido mandélico es un exfoliante suave que ayuda a controlar el acné y reduce manchas, ideal para pieles sensibles.
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El ácido láctico hidrata intensamente y promueve la reparación de la barrera cutánea, manteniendo la piel suave y flexible.
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Combinación de ácidos que favorecen un tono uniforme y una piel más clara y juvenil.
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Promueve la eliminación de células muertas y reduce los signos visibles de fatiga y daños ambientales.
Indicado para:
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Todo tipo de piel que busque un tratamiento reparador y renovador facial.
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Piel opaca, con manchas, textura irregular o signos de envejecimiento y daños causados por el sol.
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Personas que desean un producto efectivo para mejorar la vitalidad y apariencia general de la piel.
Composición:
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Ácido glicólico: exfoliante químico que renueva la piel y mejora la textura.
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Ácido mandélico: exfoliante suave con propiedades antimanchas y para piel sensible.
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Ácido láctico: hidratante y reparador que mantiene la barrera cutánea.
Modo de uso:
Aplicar una pequeña cantidad en la palma de la mano y distribuir uniformemente en el rostro, evitando el área de ojos y labios. Usar preferentemente por la mañana.
Presentación:
Envase de 30 ml.















